El Partido Socialista Obrero Español es un partido con una profunda vocación transformadora. Desde sus orígenes ha transformado la sociedad española, garantizando los derechos de los trabajadores cuando no los tenían, conquistando el derecho al voto femenino, cuando no podíamos ejercerlo y construyendo el Estado del Bienestar, cuando no existía, sobre los pilares de las pensiones, la sanidad y la educación públicas, y más recientemente la atención a las personas dependientes.
Este legado hace que todos los socialistas nos sintamos orgullosos de pertenecer a este Partido y de los logros que hemos alcanzado durante estos 132 años de trabajo.
Sin embargo, en estos tiempos nos enfrentamos con graves amenazas que ponen en riesgo nuestro modelo de sociedad. Está en juego una sociedad de derechos, frente a una de privilegios, está en juego una sociedad de igualdad de oportunidades, frente a una en la que el futuro venga predeterminado por otros intereses.
Sólo se puede hacer frente a estas amenazas desde la Política y desde el ejercicio de la misma con profundas convicciones democráticas. Y es así, por que los ciudadanos que no tienen poder para abusar de sus privilegios, sólo cuentan con la Política para que defienda sus derechos.
Por ello, el Partido Socialista, como defensor de la libertad, la igualdad y la solidaridad, sólo podrá actuar si la mayoría de los ciudadanos reconocen ese poder transformador de la Política.
Esta es la principal diferencia que nos separa de la derecha, que puede actuar en un escenario de ausencia de Política, ya que ellos defienden una sociedad basada en privilegios y, por tanto, le interesa el descrédito de la actividad política y de sus actores con la intencionalidad de hastiar a los ciudadanos de participar en la misma.
Por tanto, el Partido Socialista tiene como misión recuperar la confianza de los ciudadanos en la Política y esa es su tarea más importante. Y es una tarea tan importante, que debe anteponerse a lo urgente, como pudiera ser ganar unas elecciones.
Según los últimos datos del Centro de Investigaciones Sociológicas la clase política y la Política se sitúan como el tercer problema de los españoles. Esto hace que resulte imprescindible revertir esta situación y debe ser el principal motivo que nos mueva a los hombres y mujeres que nos sentimos orgullosos de ser socialistas.
A nuestro entender sólo es posible recuperar la confianza en la Política si recuperamos la dedicación de la militancia de base a la tarea de hacer Política. De todos aquellos militantes que se sienten orgullosos de ser socialistas, por encima del momento actual, de la coyuntura o de la persona que dirija la organización.
Y además, resulta conveniente, y sano democráticamente, que haya mucha más gente dedicada a la Política, a la vez que se reduce el número de cargos públicos. Porque debe ser posible dedicarse a la Política sin renunciar al ejercicio de tu profesión.
Actualmente parece dar la impresión que sólo se ejerce la Política cuando se ocupa un cargo público, y se reduce la posibilidad participación real y efectiva en Política sólo a aquellos que ocupan cargos.
Desde Orgullo Socialista creemos que únicamente desde el ejercicio de la militancia de base es posible recuperar la confianza y la ilusión en la Política. Y para ello es necesario abrir espacios de participación a través de nuevas formas que dejen atrás modelos piramidales de organización y busquen modelos de trabajo horizontales y en red.
Eso contribuirá a que mucha más gente se interese por la Política, se sienta partícipe y no excluido de la toma de decisiones dentro del Proyecto Socialista; lo que contribuirá a que muchas personas que hoy día hay que buscar fuera del Partido, las encontremos de antemano dentro de nuestra Organización.
Muchos pueden ser los mecanismos que contribuyan a conseguir este reto de contar con una militancia de base más amplia, más activa, más implicada y motivada, y todos tenemos que tomar partido y hacer posible aquello que la sociedad nos demanda.
Siénte el Orgullo de ser Socialista.